La combinación de altitud a 1250 metros sobre el nivel del mar, un clima semidesértico con 300 días de sol anuales, días calurosos y noches frescas, suelo aluvional con excelente drenaje y el acuífero más puro de la región que fluye libremente para regar los viñedos de Casa de Uco, dan como resultado las condiciones ideales para reproducir en cada botella la expresión del Valle.